Un interesante artículo el de Manuel Conthe que nos alerta sobre la perversión de las métricas en el día a día de las organizaciones.
Es una evidencia que allí donde haya una métrica que permita un cobro, habrá alguien tratando de pervertirla. Es un hecho común en los sistemas de incentivos comerciales donde todos sabemos que inmediatamente tras su implantación, los propios comerciales estudian todas las formas posibles de “reventar” el sistema en su beneficio.
Sin embargo eso no debe llevarnos a no medir. Lo que nos debe hacer es ser más cuidadosos con los indicadores que establecemos para medir los objetivos que pretendemos conseguir (para nosotros o para nuestros clientes).
Mi experiencia me dice que un indicador es bueno o malo, no porque cumpla las (lo siento, pero es mi opinión) muy obvias reglas MARTE (que no sirven para casi nada), sino aquella que, como en el artículo cuyo link os adjunto a continuación (https://openviewpartners.com/blog/metrics-gone-bad/) lleva detrás un análisis suficiente sobre su idoneidad y sobre sus efectos.
El “pagamos por KW introducido en la red desde instalaciones renovables” es un ejemplo palmario de lo que no hay que hacer porque inmediatamente alguien enchufa un generador de gasoil y lo pone a trabajar por las noches (y por desgracia es un caso real).
Debemos medir porque si no nunca sabremos cómo avanza nuestra estrategia. Pero debemos tener cuidado con las métricas. Que no nos confundan.
https://www.expansion.com/blogs/conthe/2020/02/04/incentivos-y-metricas-el-efecto-cobra.html